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jueves, 9 de agosto de 2018

Guerras exclusivas del inclusismo


Cada día veo algún episodio nuevo de eso que llaman “lenguaje no inclusivo”, y, sinceramente, vuelvo a pensar que como personas dejamos mucho que desear, porque creo que cada vez hay más brújulas erráticas.

Y como "pedrado" no existe, al menos hasta ahora, aquí va la pedrada (según una de las acepciones de la RAE, “Expresión dicha con intención de que alguien la oiga y se dé por aludido”):

Parece ser que según cómo escribamos las cosas formamos parte, sin haberlo pedido, y sin que nos lo hayan pedido, de una especie de partido o liga cuya competición se basa en estar a favor o en contra de la “imperiosa necesidad” de crear versiones nuevas de determinadas palabras en base al uso interesado de su género, esas mismas palabras que durante años han servido para comunicar a tantas miles de personas sin ningún problema.

¿Por qué nos empeñamos en crear guerras innecesarias para justificar lo que no hacemos en actos, con cruzadas en pro de cambios de lenguaje?
Es una cuestión de educación, no de escritura, Es producto de la incultura y del empeño en educar a personas desde ópticas diferentes, cuando en realidad solo hay un tipo de persona: el ser humano.

Perdónenme, pero me da risa tanto inteligente salido de no se donde, y erigido en Cid Campeador del lenguaje, que en algunos casos lo maneja solo de oídas.
Habrá que reescribir el Quijote, Fuenteovejuna, el Lazarillo de Tormes, La Celestina (por si no lo saben su verdadero nombre el Tragicomedia de Calixto y Melibea y la Puta Vieja Celestina) y tantas otras obras de arte de la literatura, que esos mismos nuevos hidalgos de paja posiblemente no han leído en su vida.

Parece ser que la solución a todos esos problemas de conducta humana pasa por un simple corrección o cambio en nuestra forma de expresión gramatical y/o semántica, e inmediatamente dejaremos de tener comportamientos "exclusivos" para convertirnos en seres "inclusivos".
Me explico:
“Soy deportisto, pero nunca he querido ser futbolisto, porque mis piernos no entienden de patados, solo de caminatos, en “los” cuales se respira de otra manera el aire que llega hasta mi caro.”
¿De verdad piensan que esto es lo que soluciona el problema? No lo soluciona. Ni siquiera creo que ayude a ello.

Es que si seguimos así, lo próximo será incluir en el código penal como delito que un matemático estudie matemáticas, porque se va a entender casi como un abuso sin consentimiento o una  violación, y, señores, un abuso sin consentimiento o una violación SI es algo muy serio. Lo de estas cruzadas del lenguaje, con perdón, son ganas de hacer polvajera.

Es la misma mano (¿o debo decir mana para no herir susceptibilidades?) la que golpea a un hombre o una mujer, y a ambos no le va a doler menos porque tenga género masculino o femenino, le duele por quien golpea.

No se, llámenme loco, pero me da por pensar que, en lugar de tapar carencias con corrientes de moda que solo generan “bulla” y más enfrentamiento innecesario, igual podrían dedicar ese tiempo a educar mejor en su ámbito de influencia, pero con hechos.


1 comentario:

  1. Mejor explicado, creo que no. Me ha resultado muy gratificante leer este comentario.

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